
Ropa Cortaviento
Factor de frío en cubierta
Ya sea un Mistral en la Costa Azul, una Tramontana en Mallorca o un duro nordeste en el mar del Norte, el viento arranca la fina capa de aire cálido de tu piel al instante. Este efecto windchill hace que la temperatura percibida caiga muy por debajo de la real; a +5 °C con 40 km/h de viento, la sensación puede ser de helada en cuanto la rociada salta por la proa.
Capas cortaviento – calor sin concesiones
Tejidos densamente trenzados o laminados multicapa bloquean ese flujo de aire, mientras cuellos altos, cremalleras protegidas y puños ajustables sellan cada punto débil. El aire frío se queda fuera y el vapor interior escapa: comodidad térmica sin efecto sauna, tanto si peleas la salida en PalmaVela como si avanzas ceñido al atardecer en el Báltico.
Ultraligero y siempre a bordo
Las prendas cortaviento actuales pesan apenas unos cientos de gramos y se guardan en su propia capucha. Permanecen en la bolsa del cockpit hasta que arremete la Tramontana o asoma un chubasco otoñal frente a Heligoland. Solas en las frescas mañanas mediterráneas o como capa clave de tu sistema invernal, te dan libertad para cada aventura profesional – el viento queda fuera, el rumbo es tuyo.
Imprescindibles cortaviento
Nacida para la cubierta, lista para todo lo demás. Cuando un Mistral en Palma aprieta la mayor o una brisa báltica te obliga a pelear con el winche, una capa cortaviento frena la pérdida de calor convectivo sin sobrecargar de forros voluminosos. Laminados transpirables expulsan el sudor, cremalleras protegidas y cuellos altos sellan los puntos de fuga, y cortes elásticos acompañan cada virada y trasluchada. Sin ruido plástico, sin efecto sauna: foco total en la velocidad del barco.
De vuelta en el amarre, la misma chaqueta se vuelve puro lifestyle. Desde el sundowner en la lounge del cockpit hasta la marina promenade o el rooftop bar con brisa nocturna, una shell cortaviento estilizada mantiene el frío a raya y combina con denim. Su construcción ultraligera cabe en el weekender; las líneas limpias funcionan tan bien con streetwear como con el pantalón de mal tiempo. Calidez fiable, cero complicaciones: dondequiera que sople el viento.